¡Por una huelga general indefinida y una insurrección armada para derrocar la dictadura! ¡Sin ilusiones en el imperialismo estadounidense y europeo!

 

Declaración de la Corriente Comunista Revolucionaria Internacional (CCRI/RCIT), 16 de marzo de 2021, www.thecommunists.net

 

 

 

1. La dictadura militar intenta ahogar en sangre el levantamiento popular iniciado en respuesta al golpe de Estado del 1 de febrero. Desde hace semanas, cientos de miles de personas están marchando por las calles casi todos los días. El ejército intenta reprimir brutalmente las protestas disparando a los manifestantes, deteniendo a los activistas en redadas nocturnas, etc. En respuesta, los trabajadores organizan huelgas, los activistas levantan barricadas y se forman unidades de autodefensa para luchar contra el aparato represivo. Según la ONU, al menos 138 personas han sido asesinadas desde el inicio del golpe, 56 de ellas durante el último fin de semana.

 

2. El régimen ha impuesto ahora la ley marcial en varios distritos de clase trabajadora de Yangon, así como en varias partes de Mandalay, las dos ciudades más grandes del país. Es evidente que el Tatmadaw, el ejército de Myanmar, teme perder el control. Hay varios informes de que algunas unidades de la policía y el ejército se niegan a seguir las órdenes.

 

3. La dictadura del Tatmadaw está particularmente nerviosa ya que los trabajadores y jóvenes de Myanmar están dirigiendo cada vez más sus protestas hacia las fábricas y edificios de corporaciones chinas. El 14 de marzo, los manifestantes incendiaron varias fábricas de propiedad china en la ciudad de Yangon y dañaron otras. Global Times, un periódico oficial del régimen de Beijing, cita a la Embajada de China en Myanmar que “un total de 32 fábricas con inversión china han sido vandalizadas en ataques en Yangon, Myanmar, con pérdidas de propiedad que alcanzan los 240 millones de yuanes ($ 36,89 millones) ... después los perpetradores en Yangon destruyeron, saquearon y quemaron fábricas chinas el domingo".

 

4. No es de extrañar que la ira popular en Myanmar se dirija contra el imperialismo chino. Los regímenes capitalistas-estalinistas de Pekín tienen estrechas relaciones con el Tatmadaw y han apoyado de facto el golpe de Estado. China es uno de los mayores inversores extranjeros y planea integrar al país en su Iniciativa Belt & Road. El llamado Corredor Económico China-Myanmar, un enorme proyecto de infraestructura (con más de $ 21 mil millones de dólares en inversión extranjera directa aprobada en marzo de 2020) permitiría la conexión directa de Beijing con el Océano Índico, sin pasar por el Estrecho de Malaca. Por lo tanto, promovería el acceso de China al mercado mundial y mejoraría sustancialmente su posición geopolítica en la región.

 

5. La Corriente Comunista Revolucionaria Internacional (RCIT) reitera su apoyo total e incondicional a los levantamientos populares de los trabajadores, jóvenes y campesinos pobres de Myanmar. Apoyamos las demandas de liberación de todos los detenidos por los militares. ¡La dictadura militar debe ser derrocada por una huelga general indefinida y una insurrección armada de las masas populares! Para ello, es fundamental la construcción de comités de acción en los lugares de trabajo, barrios, escuelas y universidades que puedan organizar milicias armadas para defender al pueblo de la represión estatal. También repetimos que, en nuestra opinión, es crucial que los activistas desarrollen agitación entre los soldados para dividir al ejército.

 

6. Consideramos plenamente legítimas las acciones militantes contra la propiedad del imperialismo chino. La dictadura militar necesita desesperadamente el apoyo de las grandes potencias y China es sin duda su patrocinador más importante. Naturalmente, nos oponemos a cualquier forma de nacionalismo dirigido contra el pueblo chino. Es la clase dominante capitalista-estalinista de Pekín la que es enemiga de las masas populares tanto en Myanmar como en China. Una declaración pública de Thinzar Shunlei Yi, líder de la protesta, indica que muchos activistas comparten ese entendimiento. Ella dijo en Twitter que la gente de Myanmar no odia a sus vecinos chinos, aunque sus gobernantes deben entender la indignación que sienten por su postura. "El gobierno chino debe dejar de apoyar al consejo golpista si realmente se preocupa por las relaciones entre China y Myanmar y para proteger sus negocios".

 

7. La indignación popular contra las empresas chinas ha provocado protestas en toda la comunidad de capitalistas extranjeros. Global Times informa: “Algunos empresarios chinos en Yangon planeaban suspender sus operaciones comerciales; algunos se mudaron al centro de la ciudad, mientras que otros optaron por quedarse para proteger sus negocios.“ En respuesta, Beijing exige al régimen militar con palabras fuertes que reaccione con toda su fuerza. "Deseamos que las autoridades de Myanmar puedan tomar más medidas pertinentes y efectivas para garantizar la seguridad de las vidas y los activos de las empresas y el personal chinos", dijo el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores, Zhao Lijian. Un editorial del Global Times del 15 de marzo exige: "Aquellos que difamen maliciosamente a China e instiguen ataques contra las fábricas chinas son enemigos comunes de China y Myanmar, deben ser severamente castigados". Al mismo tiempo, Global Times se ve obligado a reconocer que la hostilidad no se limita a unos pocos "fanáticos", sino más bien generalizada entre la población de Myanmar. "El sentimiento anti-China en Myanmar ha perjudicado a los residentes chinos normales y las actividades económicas, lo que obligará a algunas empresas chinas a repensar el entorno de inversión en Myanmar". Por lo tanto, el régimen capitalista-estalinista dirige su advertencia, a través de su portavoz, a las masas populares en el título de un artículo: “Se pide al pueblo de Myanmar que se abstenga de ser incitado por Occidente a dañar las relaciones entre China y Myanmar”.

 

8. Al mismo tiempo, la RCIT advierte contra cualquier ilusión en el imperialismo occidental. Estados Unidos y la UE han impuesto sanciones simbólicas contra algunos generales. Lo han hecho porque el Tatmadaw es un aliado de China. Por el contrario, la primera ministra detenida, Aung San Suu Kyi, ha estado bastante más cerca de Estados Unidos y la UE. Pero el imperialismo estadounidense y europeo no son aliados del pueblo de Myanmar ni defensores de los derechos humanos y la democracia. ¡Solo mire a sus aliados dictatoriales en Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos! Los imperialistas occidentales están interesados exclusivamente en promover sus intereses geopolíticos contra China, su rival más importante en la lucha por la dominación mundial.

 

9. La RCIT llama a los revolucionarios en China a tomar una posición solidaria con la lucha democrática de los trabajadores, jóvenes y campesinos pobres de Myanmar. Seguramente, el régimen capitalista estalinista de Beijing le dirá a su gente que las protestas en Myanmar son una “conspiración occidental”. Pero los marxistas saben que la lucha de clases es la fuerza impulsora de la historia y que las rebeliones populares son obra de millones de personas que luchan por sus derechos democráticos y sociales fundamentales, ¡y no el resultado de conspiraciones de tal o cual servicio de seguridad!

 

10. Sin duda, el régimen de Beijing apelará a los sentimientos patrióticos del pueblo chino. Es cierto que China sufrió durante el siglo de humillaciones (1839 a 1949) por parte de las arrogantes y brutales potencias coloniales. En ese momento, todo auténtico demócrata y socialista estaba con el pueblo chino y contra los imperialistas extranjeros. Pero la historia de China es mucho más larga, ya que es una de las civilizaciones vivientes más antiguas del mundo. Antes y desde el siglo de la humillación, China ha sido una potencia que no era una nación oprimida, sino un Imperio que oprimía a otras personas. Esto es particularmente cierto hoy en día, donde el imperialismo chino reprime no solo a su propia clase trabajadora, sino también al pueblo musulmán uigur, al pueblo del Tíbet y de Hong Kong. Además, China se ha convertido en uno de los mayores inversores extranjeros imperialistas, super-explotadores de trabajadores y pobres en todos los continentes. Hoy en día, los marxistas chinos reconocen a los oprimidos en Xinjiang y el Tíbet, a la juventud rebelde de Hong Kong, a los trabajadores explotados en las fábricas de propiedad china en el extranjero como sus verdaderos aliados en la lucha contra la clase dominante en Beijing. ¡La lucha por el socialismo es una lucha internacional!

 

 

 

Oficina Internacional de la RCIT

 

 

 

* * * * *

 

 

 

Llamamos la atención del lector sobre otros documentos de la RCIT sobre el golpe militar en Myanmar que se compilan en una subpágina especial en nuestro sitio web: https://www.thecommunists.net/worldwide/asia/collection-of-articles-on-the-military-coup-in-myanmar/

 

Véase también: Myanmar: ¡Solidaridad con el levantamiento de los musulmanes rohingya! ¡No al chovinismo budista del régimen! ¡Por el derecho de los rohingya a la autodeterminación nacional! 27.08.2017, https://www.thecommunists.net/worldwide/asia/solidarity-with-rohingya-muslims/

 

Almedina Gunić: ¡Alto a la limpieza étnica de los musulmanes rohingya! Recordando la guerra en Bosnia y el genocidio en Srebrenica, debemos detener la guerra en curso contra nuestros hermanos y hermanas rohingya, 15.09.2017, https://www.thecommunists.net/worldwide/asia/ethnic-cleansing-of-rohingya/