¡Trabajadores y oprimidos necesitan organizarse y pelear independientemente!

 

Declaración de la Corriente Comunista Revolucionaria Internacional (RCIT), 15 de octubre del 2020, www.thecommunists.net

 

 

 

1. Las próximas elecciones de Estados Unidos son diferentes a las pasadas. No es debido a que ambos candidatos son seniles. Es diferente por las circunstancias bajo las cuales se desarrolla este escenario. Estados Unidos experimenta, simultáneamente, una decadencia drásticamente acelerada como potencia hegemónica global, así como su peor crisis interna desde la guerra civil en 1861-65. En resumen, las principales características de esta crisis son:

 

a) El país se Encuentra en medio de una depresión económica no vista desde 1929-33 con millones de personas en búsqueda de empleo sin encontrarlo,

 

b) Su clase gobernante esta profundamente dividida, lo que resulta en una feroz lucha de facciones, parálisis y amenazas de un golpe de estado de facto,

 

c) Washington sufrió una serie de reveses y derrotas en política exterior que resultaron, entre otros, en un proceso humillante de retiradas militares de Irak y Afganistán.

 

d) El país ha experimentado un levantamiento popular a raíz del sádico asesinato de George Floyd por la policía a fines de mayo, hecho que provocó una ola de manifestaciones masivas, más de 750 huelgas y enfrentamientos en las calles en numerosas ciudades.

 

2. Frente a un declive sin precedentes del capitalismo, la clase dominante en los Estados Unidos está profundamente dividida en definir la mejor forma de salvarse a ellos mismos a expensas de los trabajadores y los oprimidos. Trump y Biden, los republicanos y los demócratas ofrecen caras y palabras diferentes, pero comparten la determinación de atacar los derechos sociales y democráticos de las masas populares. Ambos son por igual enemigos de la clase trabajadora, Biden no menos que Trump. En este caso, es más urgente que nunca que los trabajadores y los oprimidos tomen el camino de la lucha independiente y la organización independiente. Tal independencia requiere negar el apoyo a cualquier candidato y partido de la clase capitalista gobernante. Es por ello que la Corriente Comunista Revolucionaria Internacional (RCIT) llama a no votar ni por Trump ni por Biden, ni por los republicanos ni por los demócratas en las próximas elecciones.

 

3 Los líderes de la Federación Estadounidense del Trabajo y Congreso de Organizaciones Industriales (AFL-CIO), de las organizaciones de masas de personas de color, así como varios grupos de izquierda, apoyan a Biden y los demócratas. Algunos lo hacen sin crítica, otros lo combinan con la crítica política. Somos conscientes que dado el carácter ultra reaccionario, provocador y absolutamente incongruente del hombre naranja, muchos trabajadores y oprimidos votarán por Biden, no realmente porque lo apoyen, sino como táctica de rechazo hacia Trump. Si bien compartimos plenamente su desprecio hacia el instigador racista, creemos que votar por Bideny los demócratas es una táctica incorrecta. Representa en realidad un callejón sin salida que obstruye la creación de un camino independiente de lucha para los trabajadores y los oprimidos. Sin embargo, también es llamativo y alentador que importantes sectores de la vanguardia parezcan rechazar esta lógica electoralista.

 

4. La RCIT también rechaza votar por candidatos del partido verde, ya que ha sido defendido en el pasado por varias fuerzas centristas como la ahora disuelta Cliffite ISO o Alternativa Socialista (CWI/ISA). Aquellos del verde son una fuerza pequeñoburguesa sin raíces entre la clase trabajadora y sin antecedentes de haber jugado un papel serio en luchas de masas como el actual levantamiento “Black live matters”.

 

5. Es un argumento bien conocido de varios sanderistas, el ex estalinista CPUSA y algunos de los llamados “marxistas” afirman que Biden y los demócratas representan el “mal menor”. Lo cual es en absoluto cierto. La desigualdad social aumentó drásticamente en las últimas décadas, no menos durante el periodo de Clinton y Obama que durante la presidencia de Bush y Trump. En los primeros 3 años de Obama en el cargo, alrededor de 1,18 millones de inmigrantes fueron deportados, mientras que alrededor de 800,000 deportaciones se llevaron a cabo siendo el responsable Trump en sus 3 años de presidencia. Los asesinatos brutales de negros a manos de la policía tienen lugar en los estados “azules” en un número no menor que en los estados “rojos”. Sin duda, es cierto que Trump es un reaccionario extraordinario provocador y estúpido. De hecho es una especie de líder disfuncional del capitalismo estadounidense. No es de extrañar que más multimillonarios hagan donaciones para la campaña de Biden que para la campaña de Trump o, citando a la revista de negocios Forbes, “los multimillonarios parecen amar a Joe Biden”. Una presidencia de Biden podría ser más integradora, menos provocativa que el payaso actual. ¡Pero los socialistas no tienen ninguna razón para favorecer un liderazgo más funcional del capitalismo estadounidense! ¡Más bien necesitan defender un programa de lucha más funcional contra todos los gobernantes capitalistas!

 

6. En caso de que Trump gane las elecciones mediante un fraude masivo e intimidación a los electores, Biden no abogará por una lucha masiva para expulsar al lunático de la Casa Blanca. Hará todo lo posible para evitar tal tormenta de la Bastilla, pero en realidad se limitará a apelar (y esperar) a los tribunales. En caso de que Biden gane las elecciones, trabajará duro pacificar y poner fin al levantamiento popular para que la clase dominante pueda continuar descargando los costos de la peor crisis del capitalismo a espaldas de los trabajadores y los pobres. En cualquier caso, Biden es el candidato de los multimillonarios y un obstáculo para la lucha de las masas populares. Si los socialistas votaran por Biden, fomentarían la confianza política en este enemigo del pueblo y harían más difícil continuar y profundizar la lucha después de las elecciones.

 

7. Por lo tanto, la tarea de las fuerzas revolucionarias es explicar pedagógicamente que la lucha en defensa de nuestros derechos sociales y democráticos debe realizarse independientemente de cualquier facción de la burguesía. Esta lucha debe tener lugar, ante todo, en las calles, en los lugares de trabajo y en los barrios. Para ello es urgente construir asambleas populares y comités de acción en lugares de trabajo, barrios, escuelas, universidades. Estos comités deberán decidir sobre las demandas y el curso de acción. También deben elegir delegados para que pueda haber una coordinación regional y nacional. Asimismo, es necesario construir comités de autodefensa armados para defender a los trabajadores y oprimidos contra el enemigo en azul y expulsar a la policía y agitadores de derecha de los barrios en la mayor medida posible.

 

8. Lo más importante es que los revolucionarios deberán defender la creación de un partido obrero independiente basado en organizaciones de masas de la clase trabajadora y los oprimidos. In partido así permanecería completamente independiente de los dos partidos ya establecidos por el régimen capitalista, tanto los republicanos como los demócratas. Llamamos a los sindicalistas, partidarios de Sanders y el DSA a romper con el Partido Demócrata y unir fuerzas para construir un nuevo Partido Laborista. Los revolucionarios abogan por un programa de lucha para este partido, que apunta a la creación de un gobierno obrero que expropia a los super ricos y nacionaliza los sectores centrales de la economía bajo el control de los trabajadores. ¡La RCIT quiere unir a los activistas revolucionarios sobre la base de tal programa! ¡Únete a nosotros!

 

 

 

Buró Internacional de la CCRI/RCIT

 

 

 

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La RCIT ha publicado diversos documentos sobre el levantamiento popular en los Estados Unidos que compilan en una subpágina especial en nuestro sitio web: https://www.thecommunists.net/worldwide/north-america/articles-on-uprising-after-murder-of-george-floyd/.