Declaración fundacional de la Agrupación Lucha Socialista

Ante la profundización de la crisis económica y estructural, los capitalistas -con la complicidad del gobierno-, arrojan golpes descarados para que sea la población, de por sí pauperizada, quien pague la crisis. La reciente aprobación de las Reformas Estructurales es el instrumento que consolida jurídicamente el arrebato sistemático de las conquistas sociales y laborales para convertirlas, de un bien público, en una fuente de lucro privado para los inversionistas nacionales y extranjeros.

La nacionalización del petróleo en 1938, los sistemas de salud pública (IMSS, ISSSTE, etc.), las prestaciones laborales, los contratos colectivos de trabajo, la educación pública, todos esos derechos, (consagrados en la constitución y ahora arrancados por los partidos del régimen) fueron obtenidos por la lucha de nuestro pueblo desde la Revolución mexicana, pasando por la lucha de campesinos, ferrocarrileros, médicos, petroleros y electricistas hasta el movimiento estudiantil de 1968. La fuerza de las masas fue acallada por el régimen priísta por dos vías: fuego y desaparición hacia los sectores que se mantuvieron independientes y no claudicaron en su lucha, y cooptación para aquellas organizaciones “opositoras” en el discurso pero alineadas en los hechos a la política gubernamental a cambio de ciertos privilegios. Este mecanismo ha formado direcciones patronales completamente al servicio del estado como los sindicatos charriles de filiación priísta, por un lado, y en la izquierda, direcciones caudillistas y burocráticas que han exaltado personalismos y sembrado la práctica de movilizar sólo para negociar prebendas particulares, a cambio de contener a sus bases para que no búsquen de cambios más profundos.

En la actualidad, maestros, campesinos, pueblos afectados por las mineras o por la inseguridad salen dignamente a defender su patrimonio, sus recursos o su vida. Sin embargo, son pequeñas llamas que aún no logran incendiar al país, hacen faltan nuevas direcciones consecuentes y democráticas que representen realmente los intereses de la clase de los trabajadores y de los sectores populares. Direcciones que sean los primeros en estar en la línea de fuego conquistando la seguridad social que nos ha arrebatado el gobierno, que rindan cuentas, que estén en profunda comunicación y consulta con sus bases, con la paciencia de transmitirle su experiencia y de formarlas con capacidad crítica. En este momento, de debacle para el capitalismo, las masas pueden barrer con este sistema si confían nuevamente en ellas mismas, si rescatan las experiencias de luchas pasadas y, sobre todo, si se organizan coordinadamente para golpear como un solo puño.

La Agrupación Lucha Socialista (ALS) se funda con el firme propósito de, acompañando y participando codo a codo en las luchas de nuesto pueblo, abonar a la formación de nuevas direcciones  políticas y sociales democráticas y consecuentes, forjando simultánea e inseparablemente una organización al servicio de la lucha política y social de la clase trabajadora y de los sectores populares, campesinos, estudiantiles y de mujeres.

Sus integrantes provenimos de distintas experiencias de lucha, siendo una de ellas, la escisión del Grupo de Acción Revolucionaria debido a las diferencias de concepción y prácticas de carácter organizativo. La Agrupación Lucha Socialista reivindica la tradición organizativa del marxismo revolucionario y la necesidad de la creación de un partido que luche, junto a ella, por los intereses de la clase trabajadora; que sea parte de un movimiento que impida la aplicación de las reformas estructurales, pelee contra la carestía y el trabajo precarizado, así como contra el feminicidio y la criminalización de la protesta y de la juventud. Para ello, reivindicamos las organizaciones amplias, democráticas e independientes del pueblo, con sus métodos de lucha como la movilización en las calles y la huelga. La ALS sabe que no habrá ningún cambio real sino no se derrota el capitalismo y se avanza con paso firme hacia el socialismo, te invitamos a formar parte de este proceso.