Por Michael Pröbsting, Corriente Comunista Revolucionaria Internacional – CCRI (en inglês RCIT), Augusto 2013, www.thecommunists.net y http://www.cuba-sold-out.net/
En este resumen queremos presenta un número de tesis de los principales elementos de análisis de la Corriente Comunista Revolucionaria Internacional (RCIT) sobre la Revolución cubana, su expropiación política por la burocracia castrista-estalinista y la contrarrevolución capitalista en los últimos años.
1. La Revolución Cubana en 1959/61 fue un acontecimiento importante en el siglo 20. No fue simplemente un golpe de estado practicado por un pequeño grupo de guerrilleros armados. Tuvo lugar en el contexto de masivas luchas de los obreros y campesinos que involucró a cientos de miles y millones de estos sectores. Desde que ningún partido obrero revolucionário existía, la revolución fue encabezada por el movimento guerrillhero pequeño burgues castrista M-26-7 que abogaba por un programa de reforma burguesa, pero no defendia ninguna revolución socialista. Tampoco lo hizo la dirigencia estalinista de partido PSP buscaba tal revolución.
2. La Revolución Cubana pronto conoció la abierta hostilidad y la desestabilización por parte del imperialismo norteamericano. La presión de la contrarrevolución, por una parte y de la lucha de clases interna, por otro lado presionó a la burocracia castrista. Su única posibilidad i) para mantener el poder y los privilegios, ii) para apaciguar a la presión de las masas, pero controlarlas al mismo tiempo, y iii) para resistir la agresión del imperialismo estadounidense fue transformar Cuba burocráticamente en un estado obrero degenerado y hacerse un estrecho aliado de la burocracia estalinista de la URSS. De ahí la burocracia castrista se vio obligada a expropiar a la burguesía nacional y extranjera, para oprimir a la actividad independiente de la clase obrera y de aliarse con la Unión Soviética en 1960-61. En este processo el castrista M-26-7, así como la dirección estalinista PSP deciden unir fuerzas y formar el PCC (en la que el liderazgo del Castrismo fue dominante).
3. Cuba, por lo tanto, nunca fue un "país socialista". Si bien se mantuvo inicialmente un país capitalista tras el derrocamiento de Batista (aunque con una clase obrera altamente movilizada y una burguesía débil), se convirtió en un estado obrero degenerado cuando el gobierno castrista se transformó en un gobierno burocrático anticapitalista y tomó medidas decisivas para nacionalizar y planificar la economía, mientras hizo la expropiación política de la clase obrera en el verano de 1960.
4. A pesar de su degeneración burocrática, la Revolución cubana proveyó a las masas obreras con una serie de beneficios sociales concretos: los salarios aumentaron, los campesinos tuvieron acceso a la tierra, un sistema de la salud excepcional altamente desarrollado fue creado regionalmente , así como otros beneficios sociales, una baja la edad de jubilación, un alto nivel de participación regional de las mujeres en el proceso laboral, el derecho al aborto, etc.
5. Sin embargo, debido al fracaso en extender la revolución al continente latinoamericano y la dominación burocrática interna, las masas cubanas se convirtieron cada vez más pasivas y esepticas hacia el régimen. El régimen también fracasó en la construcción de una industria diversificada, por lo que la economía seguía dependiendo de la producción y la exportación de azúcar.
6. Nosotros trotskistas luchábamos por un programa de la revolución política, siempre y cuando Cuba siguió siendo un estado obrero degenerado (desde 1960 hasta 2010/11). Llamamos a la defensa del sistema de planificación y de las relaciones de propiedad proletarias contra cualquier paso hacia la restauración capitalista. Al mismo tiempo, llamamos a la abolición de los privilegios de la burocracia, así como el control sobre la economía y la sociedad. Dicho programa también incluyó la llamada para trabajar la independencia de clase (derecho de los trabajadores a la huelga, los comités de acción en los lugares de trabajo, sindicatos independientes, el derecho a formar partidos, etc). Una revolución política exitosa requiere la formación de consejos de acción (soviets) y milicias populares armadas para organizar una insurrección armada para aplastar el aparato estatal estalinista-burguesificado y reemplazarlo por un estado obrero sano, es decir, la dictadura del proletariado, tal como existía en la joven Unión Soviética en los tiempos de Lenin y Trotsky. Tal estado obrero revolucionário se habría esforzado em sí por internacionalizar la revolución en América Latina y en todo el mundo. Esta perspectiva, sin embargo no se materializó debido a la ausencia de un partido obrero revolucionario y una Internacional obrera revolucionaria.
7. La economía cubana altamente burocratizada y dependiente entró en una profunda crisis con el colapso de la URSS en 1989-91. Desde entonces, el régimen castrista es cada vez más - aunque con zigzags - volcado hacia las reformas pro-mercado. El modelo estalinista cubano se encontraba en un callejón sin salida.
8. El modelo de una restauración capitalista exitosa y una economía en crecimiento en China y sin pérdida de poder de la burocracia estalinista há convencido el liderazgo castrista que había una salida para ellos. Por lo tanto, se volvió decididamente hacia la restauración del capitalismo. Esta vez fue expresada por el anuncio de una serie de medidas pro-capitalistas drásticas en otoño de 2010 y primavera de 20011 (en torno al VI Congreso del PCC). El Castrismo había vuelto a sus raíces burguesas.
9. Despidos masivos en las empresas y la introducción de la ley del valor de propiedad estatal: En 2011 y 2012 entre 360.000 y 500.000 trabajadores fueron despedidos de las empresas estatales. El gobierno de Castro quiere despedir a un millón de trabajadores hasta 2016 - una quinta parte de la fuerza laboral total del país!
10. Gran impulso a un sector capitalista privado y la promoción de la formación de una clase capitalista nacional de dueños de propiedad privada: el sector capitalista privado ya ha crecido enormemente. El gobierno anunció reducir la participación estatal en el PIB desde el original 95% hasta alrededor del 40% para el año 2017.
11. Corte de los beneficios sociales con el fin de crear un ejército industrial de reserva de mano de obra y, por tanto, una clase obrera mejor explotable: El régimen de Castro puso fin a la práctica de pagar el 60% del salario de los trabajadores despedidos de sus puestos de trabajo. Además, aumentó la edad de jubilación en cinco años para ambos sexos, elevándolo a 60 años para las mujeres y 65 para los hombres. Además, el número de productos que se venden a precios subsidiados se ha reducido, o las cantidades que se pongan disponibles reducida substancialmente.
12. Apertura de la economía para el capital imperialista y en particular para los monopolios de China:La inversión extranjera directa se ha incrementado sustancialmente en los últimos años hasta US $ 3,5 mil millones. La mayor parte de esta inversión se concentra en unos pocos proyectos importantes como la explotación de petróleo. Cuba depende cada vez más de China, que es un importante socio comercial, inversor extranjero y acreedor. Otro elemento clave de la transformación de Cuba en una semicolonia del imperialismo chino es el establecimiento del primer Plan Quinquenal para la cooperación chino-cubana en junio de 2011.
13. Mantenimiento del régimen autoritario del PCC estalinista: El Partido Comunista está decidido a mantener la dictadura como el modelo chino ha hecho. Parte de este esfuerzo de una transformación capitalista de Estado del país es la política del régimen de los últimos años, para poner sectores clave de la economía bajo el mando de la burocracia del ejército. Según una estimación, los militares controlan cerca del 60% de la economía a través de la gestión de cientos de empresas en sectores económicos clave.
14. La transformación de Cuba de un estado obrero degenerado en una semi-colonia capitalista ha alterado las tareas para la clase obrera. Ya no se trata de organizar una revolución política, sino una revolución social con el fin de derrocar al régimen castrista y establecer um auténtico gobierno de trabajadores y campesinos.
15. Un programa de este tipo para la revolución social comienza a partir de la defensa de las conquistas sociales existentes de la Revolución y de la oposición contra las brutales medidas de la restauración capitalista: esto incluye la resistencia contra los despidos masivos, contra la privatización de las empresas estatales y los recortes sociales, la defensa de los derechos de la mujer como el aborto, así como la lucha por los derechos democráticos (derecho de huelga, la creación de sindicatos independientes, la formación de nuevos partidos, etc.).
16. Otro aspecto importante del programa revolucionario es la lucha en defensa de Cuba contra la permanente agresión del imperialismo estadounidense, así como contra la subordinación de Cuba al imperialismo chino.
17. El programa para la revolución social debe llamar para la construcción de consejos de trabajadores, campesinos pobres y de soldados y milicias armadas. Deben luchar por una insurrección armada contra el régimen castrista-capitalista y el establecimiento de un gobierno de obreros y campesinos pobres con base en dichos consejos y milicias. Un estado obrero cubano victorioso se esforzaría por internacionalizar la revolución en América Latina y más allá.
18. El éxito de la revolución socialista requiere la formación rápida de un partido revolucionario como parte de la Quinta Internacional de Trabajadores . La Corriente Comunista Revolucionaria Internacional hará todo lo posible para apoyar la formación de un núcleo revolucionario en Cuba.