Defender a Venezuela contra las agresiones políticas, económicas y de intervención militar del presidente de EEUU, Trump.
Pronunciamiento conjunto de la Corriente Socialista Revolucionaria - El Topo Obrero (Venezuela) y la Corriente Comunista Revolucionaria Internacional, 07.09.2017
1. En Diciembre de 2015, con su triunfo en las elecciones parlamentarias, las fuerzas pro yanquis, agrupadas en la MUD y el propio imperialismo se sintieron regocijados y celebraron que había llegado el momento de cortar el proceso político, que les impide manejar a su antojo la política venezolana, recuperando su hegemonía en la toma de decisiones político económicas y anunciaron la pronta caída del Régimen.
2. Maduro, apoyándose en los otros Poderes del estado burgués: ejecutivo, judicial, electoral y militar tomó una serie de medidas que le impidieron a la MUD ver realizado su sueño de ver caído el régimen, presionándoles para sentarlos en la mesa de negociación, con la mediación de los ex presidentes Martín Torrijos (Panamá), Leonel Fernández (República Dominicana) y Rodríguez Zapatero de España y un enviado especial del Vaticano el arzobispo Claudio María Celli. La MUD que había venido desarrollando su poder de movilización de masas, imponiéndose por primera vez al chavismo en este terreno el 1º de septiembre de 2016, se desmoviliza y se sienta a "dialogar".
3. A las pocas semanas, en abril de 2017, la MUD se levanta de la mesa y retoma la calle pero cambiando la metodología de movilizaciones pacíficas a enfrentamientos violentos contra las fuerzas represivas del estado y las bandas parapoliciales conocidas como "colectivos". Esta nueva etapa de confrontación desestabilizadora recibe todo el apoyo de los medios de comunicación nacional e internacionales y del propio gobierno de Washington, que se mueve abiertamente de manera directa y a través de Luis Almagro, Secretario General de la OEA, que ejecuta su papel de Ministerio de las Colonias. Poco a poco, gobiernos de Latinoamérica, Europa y el propio Vaticano se van manifestando en contra del gobierno venezolano, acusándolo de violentar la institucionalidad democrática de Venezuela y los "Derechos Humanos". La oposición envalentonada por el apoyo recibido desde las fuerzas más reaccionarias de América y de los países imperialistas de Europa, radicaliza sus métodos violentos en las llamadas Guarimbas, generando asesinatos de pobladores con armas blancas, de fuego, generaliza el uso de molotov, guayas, llegando al extremo de quemar vivas a personas por tan solo aparentar ser partidarios del gobierno; la quema y asalto de instituciones del estado, unidades de transporte público, espacios militares y hasta entidades bancarias es la tónica de los enfrentamientos que son respondidos con la violencia de la Guardia Nacional Bolivariana, policías estatales, con la participación de civiles armados, que generan otro número de muertos y heridos, que en total pasan de 100 en los más de 120 días de confrontación. La confrontación entonces fue entre los aparatos represivos del gobierno y los nuevos "libertadores" que fueron el aparato armado vanguardista y foquista de la MUD, integrados por jóvenes estudiantes y lúmpenes pagados.
4. El primero de mayo de 2017, Maduro anuncia la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente, como "instrumento de participación democrática del pueblo, hacia la paz". La MUD por momentos se ve desarmada, pero al gobierno anunciar las bases de la convocatoria totalmente antidemocráticas y manipuladas, provoca a la dirección opositora que arrecia su enfrentamiento guarimbero, disminuido de masas populares, ahora propagandizando el carácter fraudulento de la Constituyente madurista. Pero la MUD ya estaba perdiendo calle, no solo en número de participantes en las barricadas, sino en su base social, la pequeña burguesía reaccionaria, que sentía que sus consignas anticomunistas y antidictadura no calaban y que el método de las barricadas con violencia, fuertemente reprimidas, solo le causaban problemas de movilización y de tranquilidad, aparte que los mismos guarimberos empezaban a agredir a los habitantes de las urbanizaciones donde protestaban, generando rechazo hasta en las bases de la MUD y ni se diga en las del gobierno.
Dentro de este marco de violencia entre aparatos, que no de pueblo trabajador y de la convocatoria a una Constituyente "por la justicia y la paz", el presidente Trump, que veía fracasar su nueva intentona golpista, al no encontrar apoyo en las masas venezolanas ni en la FANB, arrecia su discurso anti Maduro y la movilización de sus peones a nivel internacional anunciando el desconocimiento de la Constituyente y la toma de nuevas medidas contra Venezuela.
5. El 16J, la oposición de derecha convoca una consulta, que moviliza, de acuerdo a la MUD, 7.000.000 de votantes, de lo cual no existe registro alguno pues las actas de votación fueron quemadas una vez concluido el acto, y que en realidad no debió superar los 2 millones 500.000, mientras que la participación electoral de la Constituyente el 31 de julio movilizó por lo menos 3 veces más votantes que la MUD, lo que produjo un impacto desmoralizante en las bases de la MUD y de envalentonamiento en el gobierno, que tampoco se esperaba tal movilización al acto de votación.
6. Trump, a pesar de las claras evidencias del poco o nulo apoyo militante a las acciones antigubernamentales violentas y por el contrario, de su rechazo no solo por las bases chavistas, sino por buena parte de las bases de la MUD y por la inmensa mayoría del pueblo trabajador, mostrando que no está dispuesto a abandonar a sus partidarios, avanza en el cuadre de gobiernos que acorralan a Maduro vía OEA, en rueda de prensa emite un declaración de amenaza militar contra Venezuela. En conferencia de prensa le dijo a los reporteros: “Tenemos muchas opciones para Venezuela incluyendo una posible opción militar si es necesaria”. Amenaza que se suma a una serie de sanciones económicas contra funcionarios del gobierno que produce el efecto contrario al deseado, no solo al interior de Venezuela, sino entre los aliados que había logrado sumar a su causa, produciéndose un rechazo unánime a la misma. Temeroso de perder todo, manda al vicepresidente Mike Pence a realizar control de daños, quien se ve obligado a suavizar lo dicho por Trump, diciendo que la opción militar no estaba planteada por ahora, pero el presidente, para no dar su brazo a torcer, anuncia medidas económicas contra el país -prohibiendo renegociaciones para una nueva deuda del gobierno venezolano o de su compañía petrolera estatal, lo que afectará seriamente al pueblo venezolano ya que Venezuela depende del petróleo alrededor del 95% de sus ingresos de exportaciones y de la emisión de bonos de la deuda pública.
7. Varios gobiernos derechistas y de la élite reaccionaria en América Latina y de Europa de manera orquestada con el imperio gringo siguen ejerciendo presión diplomática sobre Venezuela. Perú, incluso, el 11 de agosto expulsó al embajador de Venezuela. Estos pasos forman parte de la ofensiva reaccionaria del imperialismo norteamericano, con la intención de lograr un cambio de gobierno que cerrase el tiempo de los gobiernos "progresistas" que ya había dado pasos en Argentina con el triunfo de Macri y en Brasil con la destitución de Dilma Rousseff y en Ecuador con Lenin Moreno que se ubica a la derecha de Correa, a quién sucedió en el cargo.
8. Trump ha pasado de las amenazas a la agresión directa contra Venezuela con el objetivo de recuperar plenamente el control del mercado interno de Venezuela, compitiendo contra países capitalistas como China y Rusia, y así ayudar a solventar la crisis económica explotada en 2007-2008. Esta agresión tiene que tomarse seriamente por los sectores democráticos y socialistas revolucionarios pues implica el intento de terminar de doblegar el margen de autonomía política que ha ejercido Venezuela desde el triunfo de Chávez, para profundizar y extender los viejos lazos coloniales establecidos a partir de la explotación petrolera, al área de la minería extractiva y así ganarle a sus competidores de Rusia, China, Sudáfrica.
9. Trump es la cabeza de una política agresiva, que ha generado contradicciones en el seno de la propia burguesía imperialista, que amenaza y lleva guerra a varios de sus oponentes. El 13 de abril de este año los traficantes de guerra estadounidenses lanzaron la mayor bomba no nuclear de su arsenal –que llaman la “Madre de Todas las Bombas”- en la Provincia de Nangarhan al oriente de Afganistán. El 8 de agosto Trump declaró que Corea del Norte “se encontraría con el fuego y la furia como el mundo nunca ha visto”. Dos semanas después el presidente anunció un sustancial incremento de sus tropas estadounidenses en Afganistán y una intensificación de las agresiones militares contra los afganos. Pero así mismo ha llevado una intervención militar en Siria contra el pueblo y a la vez contra el dictador Al Asad por el control de dicho país, guerra que está perdiendo, por el apoyo económico y militar de Rusia al gobierno del dictador. Estas guerras muestran que la voluntad de Trump no son las de un timorato ni blandengue que abandona el campo de batalla, por simples derrotas en las urnas electorales. Arrogante y crudo como siempre, ha anunciado: “No estamos reconstruyendo la nación nuevamente. Estamos matando a terroristas”. Las recientes provocaciones del Pentágono contra Irán o la continuación de la guerra de drones contra la resistencia en Somalia o los rebeldes sirios en Idlib son ejemplos adicionales de la naturaleza militar fundamentalista de carácter imperialista de la Administración de EEUU.
10. De cualquier forma, sería erróneo explicar estos eventos principalmente por la naturaleza psicopática del patético hombre en la Casa Blanca. De hecho, la administración dominada por Generales y belicistas, reflejan auténticamente la determinación de una parte de la clase dominante norteamericana de defender la hegemonía imperialista que ha sido el control absoluto en la política mundial durante décadas. Con estos actos agresivos, Washington espera retomar la dominación geopolítica en América Latina y el mundo. Naturalmente, una intervención militar de los EEUU sería extremadamente riesgosa, no solo provocaría una guerra defensiva obrera y popular en Venezuela, sino también una explosión política de protestas masivas antiimperialistas en todo el continente. La reacción de los gobiernos serviles al imperio a las amenazas de Trump son la demostración del rechazo que existe en el pueblo latinoamericano a una intervención militar en Venezuela.
11. La Corriente Socialista Revolucionaria - El Topo Obrero y la Corriente Comunista Revolucionaria Internacional declaramos nuestro firme apoyo al pueblo trabajador y de a pie de Venezuela y la determinación de resistir la agresión del imperialismo Estadounidense y de sus aliados regionales. Denunciamos las amenazas militares de Trump y la agresión económica contra la nación venezolana y su pueblo, llamando a todos los pueblos de América Latina y del mundo a condenar las amenazas militares y las agresiones político económicas y por el inmediato levantamiento de las sanciones económicas.
12. Así mismo, la Corriente Socialista Revolucionaria - El Topo Obrero y la Corriente Comunista Revolucionaria Internacional, hacen un llamado a todo el pueblo venezolano a multiplicar sus preparativos organizativos, político, social y militar para resistir las presentes agresiones y las que se puedan desarrollar, en confabulación con las fuerzas proimperialistas internas y externas, de allí la necesidad de fortalecer sus organizaciones sindicales, comunales, estudiantiles y campesinas, crear milicias obreras y populares en todo el territorio nacional, entrenadas y armadas por el gobierno nacional, fortalecer las finanzas del país y debilitar las bases económicas de las fuerzas imperialistas expropiando los monopolios y la banca bajo control obrero, nacionalizar el comercio externo, romper el pacto de doble tributación con los EEUU y el No al pago de la Deuda Externa; movilizarse ante cualquier agresión patronal que violente los derechos de los trabajadores o sabotee la importación, procesamiento, producción y distribución de alimentos y bienes básicos, impulsando la expropiación sin pago y bajo control obrero de los empresarios que se cuadren con la política imperialista o golpeen los derechos de los trabajadores y el pueblo con aumentos de precios, despidos, violación de contratos…, llamamos a impulsar Asambleas Obreras y populares desde donde, sobre la base de discusiones democráticas se elijan dirigentes que se coordinen democráticamente constituyendo redes de organizaciones obreras y populares prestas a derrotar las agresiones presentes y para responder ante cualquier eventualidad que intente imponer políticas imperialistas, antiobreras y antipopulares.
13. Rechazar y combatir la agresión imperialista no significa prestarle apoyo político al gobierno de Maduro que en esencia es un régimen burgués bonapartista. Sin embargo, ante la flagrante agresión del imperialismo estadounidense, que no busca beneficiar al pueblo de Venezuela sino aumentar los lazos semicoloniales que atan a Venezuela al capitalismo internacional y la explotación del pueblo, la CSR-ETO y la CCRI declaran que la tarea del movimiento internacional de trabajadores es levantarse por la derrota de los agresores imperialistas americanos y de cualquier pelaje y por la defensa de Venezuela, impulsando la expropiación de todas las transnacionales y la banca bajo control de los trabajadores, vía sus organizaciones sindicales y laborales. La tarea de los socialistas es combinar la resistencia contra las agresiones imperialistas con un programa independiente que lucha por un gobierno obrero y popular en una Venezuela Socialista, como parte de una Federación de Repúblicas Socialistas de América Latina y el Caribe.
* ¡No a las amenazas militares del imperialismo EEUU! ¡Por la organización de milicias obreras y populares, entrenadas y armadas por el gobierno!
*Ante cualquier conflicto militar con el imperio y sus lacayos: ¡Por la derrota de la agresión imperialista yanqui!
* ¡No a las agresiones económicas! ¡Abajo las sanciones económicas! ¡Por la expropiación de los monopolios, la Banca y la nacionalización del comercio externo! ¡No al pago de la Deuda Externa! ¡Por el desconocimiento del Pacto de Doble Tributación con los EEUU!
* ¡Por la organización democrática del pueblo trabajador y de a pie en cada fábrica, barrio y centro de estudio, con coordinación nacional!
* ¡Defensa de Venezuela!
* Ante cualquier saboteo y violación de los derechos económicos, políticos y sociales del pueblo trabajador, ¡Expropiación sin pago, de la burguesía y sus aliados!
* ¡Por la solidaridad militante de los pueblos de Latinoamérica y el mundo con Venezuela y su pueblo!
¡¡¡LAS AMENAZAS Y AGRESIONES CONTRA VENEZUELA, SON CONTRA LOS PUEBLOS DE LATINOAMÉRICA Y EL MUNDO!!!
Corriente Socialista Revolucionaria – El Topo Obrero (Venezuela): http://csr-eltopoobrero.org.ve/
Corriente Comunista Revolucionaria Internacional (Brasil, México, Israel/Palestina Ocupada, Yemen, Tunicina, Turquía, Zimbabue, Zambia, Pakistán, Sri Lanka, Aotearoa / New Zelanda, Alemania, Gran Bretaña y Austria): www.thecommunists.net